AÑO SANTO JUBILAR MARIANO DE LA AMARGURA
Del 1 de enero al 27 de diciembre de 2015.
IGLESIA DEL REAL MONASTERIO DE LA MADRE DE DIOS, DE LAS COMENDADORAS DE SANTIAGO, DE LA ARCHIDIÓCESIS DE GRANADA.
Se conoce como Año Jubilar Mariano o Año Santo Mariano, al espacio de tiempo con el que la Santa Sede recompensa con especialísimas gracias a los fieles que acudan al templo al que se le concede dicho privilegio. Se trata de un gran acontecimiento religioso y se convierte en un año de remisión de los pecados y de sus penas; es un tiempo para la reconciliación, la conversión y la práctica de la misericordia, la justicia y la fraternidad, además de propiciar una renovación de los deseos por servir a Dios en el gozo y la paz con el resto de los hermanos.
Su Santidad Francisco, por medio de la Penitenciaría Apostólica ha concedido a la Real, Muy Ilustre y Comendadora Hermandad Sacramental de Santa María, Madre de Dios, y Cofradía de la Oración de Nuestro Señor en el Huerto de los Olivos y María Santísima de la Amargura, un Jubileo con motivo de la Coronación Canónica de la Antigua, Sagrada y Venerada Imagen de su dolorosa titular.
Los siglos de devoción popular y culto continuados por parte de la población, así como su propio valor histórico-artístico han hecho merecedora a tan singular imagen del reconocimiento y honor que supone ser Coronada Canónicamente en nombre y con la autoridad del Sumo Pontífice, y por tratarse, además, de la primera que, recibiendo culto en un monasterio de vida contemplativa de la ciudad de Granada, alcanza el reconocimiento y el honor de la coronación, en el contexto del “Año de la Vida Consagrada 2015”, se ha otorgado esta especialísima gracia del Año Santo Jubilar Mariano que comprende del 1 de enero de 2015, Solemnidad de Santa María, Madre de Dios, hasta el 27 de diciembre de 2015, Fiesta de la Sagrada Familia de de Jesús, María y José, pudiendo conseguir Indulgencia Plenaria todos los fieles cristianos que verdaderamente arrepentidos, bajo las condiciones habituales (confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Sumo Pontífice), acudan en peregrinación los días de las Celebraciones que se realicen en honor de la Sagrada y Venerada Virgen de la Amargura a la iglesia del Monasterio de la Madre de Dios, de las Comendadoras de Santiago, sede de la Cofradía, y ante su bendita imagen participen en algún acto sagrado o ejercicio de piedad mariana, y oren y mediten por un tiempo ante dicha imagen, concluyendo con la Oración Dominical (el Padre Nuestro), el Símbolo de la Fe (Credo) e invocando a la Santísima Virgen María con la Oración propia del Año Jubilar.
Los ancianos, enfermos, y todos aquellos que por alguna causa grave no puedan salir de su casa, podrán conseguir la indulgencia plenaria, siempre que unidos en deseo a los que realicen la visita o peregrinación, reprobando cualquier forma de pecado , y con la intención de cumplir lo antes posible las tres acostumbradas condiciones delante de esta imagen de María Santísima de la Amargura, recitaren devotamente la Oración Dominical, el símbolo de la fe y la oración del Año Jubilar, ofreciendo humildemente sus dolores o incomodidades propias de la vida a la misericordia de Dios por intercesión de María Santísima.
Las indulgencias y gracias del Año Santo Jubilar pueden obtenerse y ofrecerse en sufragio por los fieles difuntos.
En cuanto a las obras de misericordia o caridad, la Iglesia dispone: A) Visitar, durante un tiempo conveniente, a hermanos necesitados que atraviesan dificultades (enfermos, encarcelados, ancianos solos, discapacitados, etc.); B) Apoyar con un donativo significativo a obras de caridad; C) Dedicar una parte del propio tiempo libre a actividades útiles para la comunidad eclesial; D) Conceder el perdón a alguna persona que haya causado alguna ofensa, daño o dolor, y ello especialmente en el seno de la propia familia; E) La dedicación de, al menos una hora, a la predicación, la catequesis o a algún otro modo de testimoniar la fe a otras personas, en el ámbito de la familia, del trabajo o de la vida social en general.
Con la celebración del Año Jubilar, la Cofradía de la Oración de Nuestro Señor en el Huerto de los Olivos y María Santísima de la Amargura, y el Monasterio de la Madre de Dios desean ahondar en su vocación eclesial a través de la contemplación, la oración, la acogida y el testimonio, así como profundizar en el mandamientos nuevo de Jesús,el del amor fraterno. El templo comendador abrirá su puerta santa para recibir a todos cuantos a ella acudan para encontrarse con Dios y su bendita Madre, modelo para los creyentes en Jesucristo, convirtiéndose en centro de peregrinación para que quienes lo visiten, hagan de su encuentro con la Santísima Virgen, mediadora e intercesora ante su Hijo, un verdadero testimonio de fe cristiana, y que al peregrinar en compañía de nuestros hermanos podamos vivir la gracia de la reconciliación y sintamos la alegría de la gratitud a Jesús y a quien lo acogió en sus entrañas, la Santísima Virgen María, a quienes hemos de pedir que los frutos de santidad del Año Jubilar sean abundantes en la Iglesia y, en especial, en la Vida Consagrada y su misión evangelizadora.
Este Jubileo permitirá que la iglesia de la Madre de Dios se convierta en faro de fe y gozo en el perdón de Dios para todo el orbe cristiano.
José Cecilio Cabello Velasco
Comisario para la Coronación