La Oración en el Huerto en el Arte: Luis de Morales

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Autor Luis de Morales (1545)
Técnica Óleo sobre tabla de roble
Tamaño 85 cm x 65,5 cm
Localización Museo Nacional de Prado (Madrid)

 

La oración en el Monte de los Olivos es el episodio evangélico que antecede al prendimiento de Jesús y al inicio de su Pasión y muerte en la cruz. Después de cenar por última vez con sus discípulos, Jesús se retiró junto a tres de ellos, Pedro y los dos hijos del Zebedeo, Santiago y Juan, a un huerto cercano, el de Getsemaní. Según el relato de Lucas, Jesús se apartó de ellos como un tiro de piedra y, puesto de rodillas oraba, diciendo: Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad sino la tuya. Lleno de angustia oraba con más instancia; y sudó como gruesas gotas de sangre, que corrían hasta la tierra. Levantándose de la oración, vino a los discípulos y, encontrándolos adormilados por la tristeza, les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos y orad para que no entréis en tentación (Lc 22, 41-46).

Morales configuró el tema en línea con buena parte de las representaciones al uso, situando a Jesús en lo alto de una suave loma, arrodillado y en oración, contemplando al ángel portador del cáliz y la cruz mientras que Pedro, Santiago y Juandormitan despreocupados en el primer término. La manera en que el pintor ha dispuesto a los apóstoles, desarrollando posturas y escorzos complejos que muestran un depurado dibujo y una encomiable inventiva, es poco frecuente en la pintura del extremeño. Lo mismo podríamos decir del paisaje, sin duda el de mayor complejidad de cuantos conocemos de mano de Morales y con el que se vincula a la tendencia de amplias panorámicas de la naturaleza que desde las primeras décadas del siglo XVI se había gestado en la pintura flamenca. Luis de Morales ha representado con prolija minuciosidad los pormenores de la vegetación, los árboles y los grupos rocosos que delimitan el espacio del primer término. La línea de horizonte se eleva al fondo, reduciendo la visión del cielo y permitiendo la representación de un ancho río encajado entre escarpadas montañas donde se suceden arquitecturas monumentales y la actividad de diferentes grupos humanos. Por un sendero cercano a una de las orillas, unas figuras apenas abocetadas, sugieren la llegada al huerto de Getsemaní de los soldados romanos que, guiados por Judas, se aprestan a detener a Jesús, representado según el modelo físico tomado de Sebastiano del Piombo (h. 1485-1547) que Morales había repetido en algunas de sus versiones de Cristo con la cruz a cuestas.

Hasta que esta tabla fue adquirida por Fórum Filatélico en 2003, la única Oración en el Huerto salida del taller de Moralesque se conocía era la incluida en el retablo mayor de la iglesia parroquial de Arroyo de la Luz (Cáceres), conjunto datado entre 1560 y 1563. Realizado con amplia participación de ayudantes y de mayor tamaño, no cabe duda del carácter derivativo que el ejemplar cacereño tiene con respecto al del Prado. Las figuras de los cuatro personajes -más sencillas en su concepción, de trazo esquemático y colorido menos apurado- se han comprimido en el primer plano y el paisaje ha perdido protagonismo. Bäcksbacka y Pérez Sánchez relacionaron la composición de Arroyo de la Luz con la pintura que del mismo tema realizara Jan Gossaert (h. 1478-532) hacia 1510, pero es indudable que Morales manejó además alguna otra fuente de procedencia flamenca que explicaría la composición de la versión del Prado. Esta es sin duda anterior en su realización a la de Arroyo, como ha demostrado el estudio técnico de la obra (Texto extractado de Ruiz, L. en: El Divino Morales, Museo Nacional del Prado, 2015, pp. 112-114).