VII DOLOR
MARÍA ENTREGA EL CUERPO DE JESÚS AL SEPULCRO EN ESPERA DE LA RESURRECCIÓN
JESÚS, PRIMICIA DE LOS RESUCITADOS
Lo enterraron con los malhechores, lo sepultaron con los malvados,
aunque él no cometió ningún crimen ni hubo engaño en su boca.
Después de una vida de amarguras verá la luz. 9
(Is 53, 9. 11a)
Te alabamos, Santa María,
Madre fiel junto a la cruz de tu Hijo.
LECTURA EVANGÉLICA
Del Evangelio según san Juan 19, 40-42a
Los discípulos tomaron el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en vendas, con los aromas, conforme la costumbre judía de sepultar. En el lugar donde había sido crucificado había un huerto y, en el huerto, un sepulcro nuevo en el que nadie todavía había sido depositado. Pusieron allí a Jesús. Pausa de silencio
SÚPLICA
- Invoquemos a Santa María, la Virgen de la fe.
Virgen del silencio, reaviva nuestra fe
Virgen de la esperanza, reaviva nuestra fe
Virgen de la espera, reaviva nuestra fe
Virgen de la resurrección. reaviva nuestra fe
Señor, Padre Nuestro, que en el bautismo nos hiciste partícipes del misterio de la sepultura y de la resurrección de Cristo, concédenos, por intercesión de María, la Virgen fiel, estar siempre revestidos del esplendor de la gracia y caminar a la luz del Resucitado. Él vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
MEDITACIÓN
Tu piedad es nuestra certidumbre de ser también nosotros escuchados,
y de gozar hasta en el llanto.
ORACIÓN
Oremos.
Descienda Señor, sobre nosotros, que recorrimos en la fe el camino de dolor de la Virgen Madre, la abundancia de tus dones: el consuelo y el perdón, la serenidad y la paz, la alegría y la segura esperanza, de ser asociados a la gloria de Cristo resucitado. El vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
Santa María nos proteja y nos guíe benignamente en el camino de la vida. Amén.